''Papá'' Muammar y su harén de enfermeras

Oksana Balinskaya, una de las seis asistentes ucranianas al servicio del dictador, dio detalles sobre el trato filial que le dispensaban, sus placeres personales y los suntuosos regalos que recibían del beduino
De acuerdo con las declaraciones de la mujer al diario ruso Komsomolskaya Gazeta, el equipo femenino se encargaba de la salud de Khadafi y de su familia. Balinskaya trabajó dos años para el dictador durante los cuales lo acompañó en sus viajes alrededor del mundo.

"No podíamos quejarnos. Cuando llegamos a Nueva York, «papá» ordenó que nos dieran dinero para que pudiéramos ir de compras a las boutiques", comentó la mujer.
Balinskaya comentó alguna de las excentricidades que significó la vida junto al líder libio. Entre ellas, se encuentran extraordinarios gastos suntuosos para su personal exclusivo.
"Cada año, el 1º de septiembre, el aniversario de su llegada al poder, cada trabajador de su residencia recibía un reloj de oro italiano con su fotografía. Aquellos que trabajaron seis años con él tienen toda una colección" reveló la enfermera.
"Le gusta el cuscús, servido con carne de camello o cordero. Y como a todos los libios, le gusta la cocina italiana, sobre todo, la pasta" agregó en referencia a los gustos culinarios de su ex jefe.
El dictador libio se encuentra en el poder en su país desde hace 42 años, cuando derrocó a la monarquía por medio de un golpe de estado. Las enfermeras trabajaban, además, en un hospital especialmente dedicado a Khadafi y a su familia.
"A pesar de su edad, goza de la mejor salud. La cuida y se hace un chequeo anual. Cualquiera desearía tener la presión arterial de Khadafi" comentó Balinskaya.